Predicado el 5 de Octubre.

 

Isaías 52:13-53:12

Miren, mi siervo triunfará;
    será exaltado, levantado y muy enaltecido.
Muchos se asombraron de él,
    pues tenía desfigurado el semblante;
    ¡nada de *humano tenía su aspecto!
Del mismo modo, muchas naciones se asombrarán,
    y en su presencia enmudecerán los reyes,
porque verán lo que no se les había anunciado,
    y entenderán lo que no habían oído.
¿Quién ha creído a nuestro mensaje
    y a quién se le ha revelado el poder del Señor?
Creció en su presencia como vástago tierno,
    como raíz de tierra seca.
No había en él belleza ni majestad alguna;
    su aspecto no era atractivo
    y nada en su apariencia lo hacía deseable.
Despreciado y rechazado por los *hombres,
    varón de dolores, hecho para el sufrimiento.
Todos evitaban mirarlo;
    fue despreciado, y no lo estimamos.

Ciertamente él cargó con nuestras enfermedades
    y soportó nuestros dolores,
pero nosotros lo consideramos herido,
    golpeado por Dios, y humillado.
Él fue traspasado por nuestras rebeliones,
    y molido por nuestras iniquidades;
sobre él recayó el castigo, precio de nuestra *paz,
    y gracias a sus heridas fuimos sanados.
Todos andábamos perdidos, como ovejas;
    cada uno seguía su propio *camino,
pero el Señor hizo recaer sobre él
    la iniquidad de todos nosotros.
Maltratado y humillado,
    ni siquiera abrió su boca;
como cordero, fue llevado al matadero;
    como oveja, enmudeció ante su trasquilador;
    y ni siquiera abrió su boca.
Después de aprehenderlo y juzgarlo, le dieron muerte;
    nadie se preocupó de su descendencia.
Fue arrancado de la tierra de los vivientes,
    y golpeado por la transgresión de mi pueblo.
Se le asignó un sepulcro con los malvados,
    y murió entre los malhechores,
aunque nunca cometió violencia alguna,
    ni hubo engaño en su boca.

Pero el Señor quiso quebrantarlo y hacerlo sufrir,
    y como él ofreció su *vida en *expiación,
verá su descendencia y prolongará sus días,
    y llevará a cabo la voluntad del Señor.
Después de su sufrimiento,
    verá la luz y quedará satisfecho;
por su *conocimiento
    mi siervo justo justificará a muchos,
    y cargará con las iniquidades de ellos.
Por lo tanto, le daré un puesto entre los grandes,
    y repartirá el botín con los fuertes,
porque derramó su vida hasta la muerte,
    y fue contado entre los transgresores.
Cargó con el pecado de muchos,
    e intercedió por los pecadores.