¡Anda, perezoso, fíjate en la hormiga!
¡Fíjate en lo que hace, y adquiere sabiduría!
No tiene quien la mande,
ni quien la vigile ni gobierne;
con todo, en el verano almacena provisiones
y durante la cosecha recoge alimentos.
Perezoso, ¿cuánto tiempo más seguirás acostado?
¿Cuándo despertarás de tu sueño?
Un corto sueño, una breve siesta,
un pequeño descanso, cruzado de brazos …
¡y te asaltará la pobreza como un bandido,
y la escasez como un hombre armado!